Cuando pienso un lugar en el que me gustaría
estar,
no se me ocurre otro mejor que en tu mirada.
no se me ocurre otro mejor que en tu mirada.
Esa mirada clara que me recuerda
las gotas de agua
en la arena de la playa que
dejan las olas al atardecer.
Nuestros ojos ríen cuando nos miramos
y yo me siento en una isla solitaria
en que no necesito
ni siquiera tocarte.
La fuerza de tus ojos es bastante
para que me sienta en el lugar perfecto.
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